Previsible: tras las lluvia de dólares por las “retenciones cero”, en octubre se derrumbó el ingreso de divisas
El anticipo de liquidaciones que realizaron las empresas agroexportadoras durante la vigencia de las retenciones cero hizo que cayera con fuerza el aporte de dólares el mes pasado, aunque ela cumulado anual sigue 40% por encima de 2024.
Las empresas exportadoras de granos y subproductos que forman parte de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) liquidaron divisas en octubre por U$S 1.117 millones.
Esta cifra está 84% por debajo de septiembre pasado, cuando fueron U$S 7.107 millones; y también 56% por debajo de octubre de 2024, cuando sumaron U$S 2.553 millones.
Asimismo, es la menor cifra desde octubre de 2023, en el último tramo de la presidencia de Alberto Fernández, cuando apenas ingresaron U$S 743 millones.
EL EFECTO “RETENCIONES CERO”
Sin embargo, observar esas cifras de manera aislada, como si fueran una foto sin tener en cuenta la película, es un error.
El desplome de octubre tiene directa relación con el boom que fue septiembre, fundamentalmente a raíz de la política temporaria de “retenciones cero” que aplicó el Gobierno nacional para fortalecer la oferta de dólares, en el marco de la incertidumbre financiera y cambiaria que había en el país antes de las elecciones del 26 de octubre, donde finalmente el presidente, Javier Milei, consiguió un contundente triunfo.
Efecto retenciones cero: el segundo mejor mes de la historia en liquidación de divisas
“El mes de octubre se caracterizó por la ejecución de embarques de granos y procesamiento de molienda para exportación posterior derivados del régimen especial del Decreto 682/2025 (suspensión temporal de derechos de exportación). El ingreso de divisas del mes es el resultado del anticipo de las mismas en septiembre”, enfatizaron al respecto desde CIARA-CEC.
Como parámetro, hay que tener en cuenta que los más de U$S 7.000 millones que se liquidaron en septiembre fueron la segunda mayor cifra de la historia –solo superada por los U$S 8.120 millones de septiembre de 2022, en el primer “dólar soja” de Sergio Massa– y representan el flujo promedio de divisas de tres o cuatro meses “normales”.
En ese sentido, otro parámetro elocuente es que el acumulado anual está 40% por encima del año pasado: entre enero y octubre, la agroexportación trajo al país U$S 29.564,3 millones.
Son más de U$S 8.000 millones extras con respecto al mismo período del año pasado, supera por U$S 4.500 millones la totalidad de 2024 y es el segundo monto más alto de la historia, solo por debajo de los U$S 35.000 millones de 2022.
QUÉ SON LAS LIQUIDACIONES DE DIVISAS
Cabe mencionar que, “el ingreso mensual de divisas, transformadas en pesos, es el mecanismo que permite seguir comprando granos a los productores al mejor precio posible”, recordaron desde CIARA-CEC.
Y añadieron: “La liquidación de divisas está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados, ya sea en su mismo estado o como productos procesados, luego de una transformación industrial. La mayor parte del ingreso de divisas en este sector se produce con bastante antelación a la exportación, anticipación que ronda los 30 días en el caso de la exportación de granos y alcanza hasta los 90 días en el caso de la exportación de aceites y harinas proteicas”.
Esa anticipación depende también del momento de la campaña agrícola y del grano de que se trate, por lo que no existen retrasos en la liquidación de divisas.
Para CIARA-CEC, además, “en este sector, las comparaciones estadísticas entre distintos períodos son generalmente imprecisas o inexactas ya que la liquidación de divisas está fuertemente influida por el ciclo comercial de los granos, que depende de diversos y cambiantes factores exógenos como oscilaciones internacionales de precios, retracción de la oferta, distinto volumen y valor proteico de las cosechas, condiciones climáticas, feriados, medidas de fuerza sindicales, modificaciones regulatorias, barreras arancelarias y para arancelarias del exterior, exigencias fitosanitarias o de calidad de otros países, etcétera”.
Seguir leyendo











