En plena época de parición, sostuvo el directivo de Biogénesis Bagó Sebastián Perretta. Con innovación se pueden captar las oportunidades.

Recientemente, se desarrolló el Tercer Simposio de Actualización Veterinaria de Biogénesis Bagó, en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional del Centro,  en Tandil, Buenos Aires. 

Como parte del encuentro participaron distintos especialistasy directivos de la marca. Esteban Turic (Foto 2), CEO de la compañía, presentó las características del contexto global en relación con los stocks ganaderos, las oportunidades de mercado y las amenazas que representan la peste porcina africana en china y la fiebre aftosa.

Sin embargo, el dato clave lo aportó el director comercial Sebastián Perretta (Foto 1). Destacó que: “A través de la adopción  de biotecnología  podríamos incrementar la producción en 4.7 millones de terneros al año”, en un contexto de recuperación de mercados internacionales para el país y la región. 

“Consensuar y promover desde toda la cadena pecuaria formas de trabajo innovadoras que permitan capitalizar las ventajas comparativas que ofrece nuestro país y la región, teniendo en cuenta que la sanidad es la inversión más baja y de mayor retorno, del proceso productivo” , Sebastián Perretta, directivo de Biogénesis Bagó.

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El médico veterinario Carlos Catracchia (asesor privado, coordinador de SIAL-APSAVet), destacó que el desafío para las próximas generaciones de servicios veterinarios radicará en generar servicios ágiles y modernos sin requerir estar abocados físicamente y sí con el monitoreo de procesos, protocolos y resultados.

De la jornada participaron 150 profesionales de todo el país. En las  disertaciones, los temas centrales fueron la búsqueda de una mayor productividad en los rodeos bovinos y la oportunidad que se presenta para el país en el contexto de apertura de mercados.

De la mano del Dr. Adrián Lifschitz,  profesor de Farmacología e  Investigador de Conicet, se tocó el tema de las resistencia antipasitarias, centrado en la  ivermectina,  cuyo uso ha sido acotado por esta cuestión.

Lifschitz resaltó que, a pesar de esta resistencia,  aún quedan nichos importantes para el uso de otros parasitarios. “Es importante cuidarlas y preservarlas ya que han sido uno de los descubrimientos más importantes de la medicina veterinaria”, manifestó.