En exclusiva, el CEO de Biogénesis Bagó repasa los planes de la compañía, analiza el desarrollo del mercado en el contexto de pandemia y reafirma el rumbo con el cual asumió su cargo en enero de 2019. La entrada “Lograr los objetivos que nos propusimos genera entusiasmo y compromiso” se publicó primero en Periódico MOTIVAR - Industria Veterinaria - Sanidad Animal.

En exclusiva, el CEO de Biogénesis Bagó repasa los planes de la compañía, analiza el desarrollo del mercado en el contexto de pandemia y reafirma el rumbo con el cual asumió su cargo en enero de 2019.

Luciano Aba
@aba_luciano
luciano@motivar.com.ar

En un mano a mano siempre interesante, hace unas semanas MOTIVAR pudo dialogar con el CEO de Biogénesis Bagó, el médico veterinario Esteban Turic. Allí, vía zoom, y más allá de conversar sobre el contexto, los mercados, se profundizó sobre los desafíos de la empresa de biotecnología de alcance regional e internacional, que se especializa en el desarrollo, producción y comercialización de productos para la sanidad y productividad animal.
Ocupando la tercera posición en ventas en el mercado de grandes animales de América Latina, el laboratorio veterinario argentino cuenta con más de 800 colaboradores y mantiene firme su vocación por seguir creciendo, generando nuevas unidades de negocio y avanzando en su proceso de internacionalización.
“Tenemos una organización cada vez mejor; nos enfocamos rápidamente en las nuevas coyunturas y estamos cerca de los clientes, escuchando y adaptándonos a nuestra nueva realidad y a la del sector”, aseguró el referente.

MOTIVAR: ¿Cómo es la actualidad de Biogénesis Bagó?

Esteban Turic: Sin dudas, corrimos con una desventaja positiva que fue tener una planta de producción de vacuna antiaftosa en China. Vivimos desde el primer momento la pandemia y eso sirvió como plataforma para tomar decisiones en Argentina y otros países de la región y el mundo.
Incluso antes que se declarara la cuarentena oficial en nuestro país, ya habíamos reorganizado nuestra forma de trabajo. Cuidar a las personas y su salud es hoy nuestra prioridad y un requisito indispensable para mantener la operatoria. Todas aquellas áreas que no tienen que ver con cuestiones productivas, están trabajando desde sus casas y así seguirá siendo al menos hasta el comienzo de 2021. En cuanto a la parte operativa de las plantas, se han armado grupos interdisciplinarios, ágiles y muy comprometidos con los objetivos.
En este contexto la actividad vinculada a la producción de proteínas animales no se detuvo ni en Asia, ni en Medio Oriente, ni en América Latina. Declararla esencial fue crítico para evitar un potencial desabastecimiento de alimentos. Al mismo tiempo, esto representó un compromiso para nuestra empresa en cuanto a seguir abasteciendo las campañas de vacunación, tanto las obligatorias, como las que no lo son, en distintos países. Está claro que, si se interrumpen determinadas prácticas de manejo en los animales de producción, la pandemia incluso podría haber derivado en una emergencia sanitaria que por suerte no ocurrió.
En estos meses se han generado oportunidades para la Argentina, con mayores exportaciones de carne bovina, lo cual empuja a una mayor adopción de tecnología en busca de mayor eficiencia.

¿Vieron esto también reflejado en una mayor demanda?

Si, lo vimos. No solo no se suspendió la aplicación de planes sanitarios, sino que cuando hablamos con los productores nos cuentan que los están incluso complementando y ampliando de la mano de sus veterinarios. Independientemente de la crítica situación sanitaria que vive el mundo, el mercado del cual somos proveedores está en una buena situación.

Avanzaron también en acuerdos vinculados con la lucha contra la fiebre aftosa…

Así es. Por un lado, recibimos en enero una auditoría del Banco de Antígenos de Fiebre Aftosa de América del Norte (México, Canadá y Estados Unidos), con el cual renovamos un contrato que se había firmado en 2006, realizándose la primera compra de antígeno en 2008. La renovación es por otros 12 años y ya en abril se efectuó la primera operación, con algunas diferencias respecto del acuerdo anterior. En base al desarrollo de una relación de extrema confianza, hoy no solo los proveemos de antígeno concentrado para formular vacuna, sino que también lo almacenamos. Esto generó la necesidad de invertir en una nueva área.
Además, firmamos un contrato con el Banco de Antígenos de Fiebre Aftosa de los Estados Unidos, una estructura nueva, generada a pedido de los propios productores de bovinos y cerdos. Desde el año 2018 estamos trabajando en este proyecto y sin dudas también es una alegría haberlo concretado.

¿Cómo evalúan lo que ocurre en nuestra región y los estados que en Brasil están dejando de vacunar contra la enfermedad?

Cuando miramos la situación epidemiológica global, vemos que el 70% de la población de animales susceptibles a fiebre aftosa aún vive en zonas endémicas.
Países como Argentina, Uruguay y Brasil, por ejemplo, están en una muy buena condición, la cual es consecuencia de la vacunación y la continuidad de los planes de vacunación oficiales. No solo se necesitan vacunas de buena calidad y potencia, sino también buenas campañas, con cobertura nacional, espaciadas en períodos de tiempo determinado, y así se logra un buen nivel de inmunidad del rodeo. Por otro lado, vemos lo que sucede cuando los planes de vacunación no son consistentes en el tiempo, como ha sucedido en Venezuela.
Si miramos el mapa global, veremos que estamos lejos de tener a la fiebre aftosa bajo control y sin dudas esto representa un riesgo. De hecho, países como Estados Unidos, buscan reforzar las medidas.
La decisión final respecto al momento para dejar de vacunar corresponde a la autoridad sanitaria, evaluando los riesgos y beneficios, pero también las medidas de prevención que reemplazarán a la vacunación.
También han realizado lanzamientos, reduciendo el volumen de las dosis de vacunas…
Biogénesis Bagó tiene el foco en la innovación de productos biológicos. Trabajando fuertemente en la prevención de las enfermedades que afectan a los rodeos es como podremos desarrollar la actividad de manera más eficiente y sustentable.
Es por ello que el 75% de nuestro negocio está apoyado en la producción de vacunas.
En el 25% restante contamos también con un portfolio orientado a la prevención, como es el caso de los desinfectantes. Esta es una tendencia mundial que acompañamos con innovaciones como Bioclostrigen J5, donde ofrecemos en 2 ml, lo que antes venía en 5 ml. Es un beneficio para los veterinarios, los productores y los animales.
Tendremos más lanzamientos en este sentido. Las mayores innovaciones en este campo hoy no las vemos solo en materia de combinaciones de antígenos, sino desde el punto de vista industrial y tecnológico, ofreciendo productos cada vez más seguros y eficaces, gracias al desarrollo nuevos procesos de producción, purificación y formulación.

¿Cuál es tu mirada como referente de una empresa del Grupo INSUD sobre al avance para la elaboración de una vacuna contra el COVID19 y tratamientos posibles?

Sin dudas que contar con la posibilidad de elaborar en Argentina la vacuna contra el COVID19 de la mano de una empresa como AstraZeneca y abastecer a los países de América Latina, no es fruto de la casualidad. Son años en los cuales el Grupo INSUD y sus accionistas trabajaron incansablemente en fomentar la biotecnología, generar desarrollo humano e industrial. Lo que vemos, es fruto de la visión que tuvieron Hugo Sigman y Silvia Gold, hace 30 o 40 años atrás, pero también de su acción. Es un orgullo tener empresarios de esa calidad en nuestro país, apostando por la ciencia, por la innovación y por desarrollar talento.
En Garín, Buenos Aires, contamos con uno de los polos biotecnológicos más grandes de la región, compuesto por Biogénesis Bagó, Sinergium Biotech y Mabxience. Somos más de 1.000 personas trabajando en biotecnología. Aquí se generan y desarrollan productos de altísimo valor agregado.
Más allá de las vacunas, hay también una sensibilidad de parte del Grupo por trabajar en proyectos que representen un beneficio para las personas que son afectadas por enfermedades graves, pero de baja incidencia, en cuyas soluciones otras empresas no invierten. A través de la Fundación Mundo Sano, hace más de 10 años que se trabaja con Ivermectina en proyectos de atención de enfermedades como la Malaria y otras parasitosis de zonas vulnerables.
Esto permitió empezar a realizar ensayos clínicos contra COVID cuando se comunicó desde Australia que esta molécula había demostrado, en condiciones in-vitro, que era capaz de frenar la multiplicación del coronavirus. Son muchos los años de trabajo en el desarrollo de nuevas indicaciones para moléculas antiguas y de desarrollo de productos biotecnológicos como es el caso también del suero hiperinmune.

¿Modifica el actual contexto el plan estratégico de la empresa?

No. La pandemia no ha afectado los drivers definidos en nuestro plan de cara a los próximos años. Claro que pueden modificarse los tiempos y las metodologías de trabajo, pero el objetivo es el mismo. Buscamos aprovechar nuestras ventajas competitivas, en la búsqueda de diversificar no solo unidades de negocios y especies animales, sino también avanzando en nuevas regiones, como lo son Asia, Medio Oriente y África.
Es una alegría y un orgullo poder estar hoy superando los resultados y objetivos que nos propusimos hace algunos meses atrás. Esto genera entusiasmo y compromiso en cada una de las personas que trabajan en Biogénesis Bagó.

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