Entidades como FIFRA, UNICA, la Cámara de Feedloteros y la Fundación Barbechando se sumaron al rechazo de los anuncios del gobierno, respecto de las exportaciones cárnicas de origen bovino.  BUENOS AIRES (NAP) Tras el...

Entidades como FIFRA, UNICA, la Cámara de Feedloteros y la Fundación Barbechando se sumaron al rechazo de los anuncios del gobierno, respecto de las exportaciones cárnicas de origen bovino. 

BUENOS AIRES (NAP) Tras el anuncio de la Comisión de Enlace (CEEA), de llevar adelante un cese de comercialización, entre el 20 y el 28 de mayo, continúan los rechazos a la decisión del gobierno de suspender las exportaciones de carnes, continúan los rechazos a la medida.

En ese sentido desde FIFRA, aseguraron que se sigue la sucesión de hechos “con suma preocupación, somos espectadores del anuncio realizado por el Presidente de la Nación a un sector de la Industria Frigorífica que implicaría la “limitación” de exportaciones durante 30 días.

“Desde FIFRA consideramos que una decisión de tal carácter, anunciada de manera intempestiva, a una semana de haber puesto en marcha un programa de precios y a días del inicio de un sistema de Declaraciones Juradas de Exportación de Carne, es absolutamente extemporánea”, asegura la entidad.

Los efectos negativos del cese de exportaciones o “limitaciones” son por todos conocidos, ocurrieron a partir del cese declarado por Nestor Kirchner en 2006 y, lo siguieron una serie de medidas intervencionistas que tuvieron el mérito de lograr la liquidación de un stock ganadero equivalente al de Uruguay (12 millones de cabezas que a una década no se recuperó el cierre de frigoríficos, pérdidas de empleo, o de confianza en los compradores internacionales y el precio de la carne más cara para los consumidores argentinos en 2011.

Los anuncios del cierre de las exportaciones de carne es absolutamente intempestiva.

“Es absolutamente intempestiva la decisión porque todos los actores tienen prevista su producción y asumidos compromisos de entregas lo que representara incumplimientos contractuales”, considera la FIFRA.

Sin ir mas lejos, vence el 30 de Junio el periodo de cumplimiento de cortes Hilton con beneficios arancelarios. Esta medida hará perder la oportunidad de aprovechar esos beneficios arancelarios y serán menores ingresos de divisas al país.

Esta medida además de afectar directamente al sector de ganados y carnes, agrava la situación institucional del país y por ese motivo: “Hacemos un llamado a todos los sectores a que se expresen, para demostrar el desencanto con la medida e instar a su inmediata revisión”.

La comunicación es un medio pacífico y democrático de demostrar el descontento con la gestión de gobierno.

DESDE LA CAF

Por su parte, la Cámara Argentina de Feedlot (CAF), “manifiesta su total rechazo a cualquier medida que implique el cierre o limitaciones a las exportaciones de carne”.

“Frente a la medida anunciada por el Presidente de la Nación a representantes de la industria exportadora de carne, manifestamos nuestro rechazo al considerar las mismas inapropiadas, arbitrarias, extemporáneas y contrarias al trabajo conjunto público – privado, tendiente a la creación de empleo, agregado de valor agroindustrial y generación de divisas”, consigna la Entidad en un comunicado distribuido esta tarde.

Al respecto, asegura la entidad: “Ésta decisión también se contradice con el objetivo de la medida, donde se expresa la necesidad de prohibir y regular las exportaciones de carne para lograr un control sobre el precio de la carne vacuna en el mercado doméstico”.

De hacerse efectiva esta iniciativa, afectará el nivel de empleo directo e indirecto en todos los eslabones de la cadena, generará un daño innecesario al productor en la categoría vaca conserva y, manufactura que no tienen consumo interno ni en carnicerías ni en supermercados y representan más del 70% de las exportaciones actuales.

Alguna posible baja temporal de los precios por esta medida será contraproducente en el mediano y largo plazo en función de la baja en la producción de kilos con una menor oferta futura por desaliento y ralentización de los procesos de engorde, incluyendo productores que dejaran la actividad.

De efectivizarce el cierres de las exportaciones cárnicas, el nivel de empleo directo e indirecto será afectado en todos los eslabones de la cadena.

El daño generado a la ganadería con este tipo de medidas se suma al permanente incremento de costos generado tanto por la macroeconomía como por el aumento sufrido en los principales insumos del engorde.

La destrucción de confianza sobre una de las actividades más federales en su distribución territorial y escalas productivas genera desarraigo y mayor pobreza.

Estas situaciones no hacen más que desalentar el desarrollo económico con señales adversas para los sectores productivos, inversores y fundamentalmente al sector agropecuario y la agroindustria, motores fundamentales y necesarios para sortear la situación actual que atraviesa el país.

“Instamos al Sr. Presidente de la Nación a rever esta decisión y retomar el camino del diálogo y consenso”, insistieron desde la CAF.

BARBECHANDO SE SUMA A LOS RECLAMOS

Otra de las entidades que se sumó a los rechazos a la posible suspensión de las exportaciones de carne es la Fundación Barbechando, una entidad que interactúa con los legisladores sobre temas vinculados a la producción agroagroindustrial.

“Hoy es un día triste para la Argentina. No sólo ha quedado el campo sin incentivos para producir, sino que se avecinan consecuencias nefastas como las ya padecidas”, asegura la organización, con relación a los anuncios del gobierno nacional respecto de las exportaciones de carne

En un documento al que accedió www.noticiasagropecuarias.com, la organización agrega que la decisión de impedir las exportaciones de carne dinamitó, en el pasado, “la confianza de los mercados que durante años creyeron en nuestro país”.

“Se perdieron puestos de trabajo, cerraron industrias frigoríficas y se disminuyó fuertemente el stock de ganado local y alrededor de 30.000 productores debieron vender sus tenencias”, destaca la Fundación.

Una medida de esta magnitud destruye la confianza y genera desaliento en la producción.

El cierre de las exportaciones de carne es mucho más que una medida del gobierno que intenta frenar equivocadamente, las subas en el mercado interno.

“Hoy se quebró la esperanza de miles de familias que están involucradas en la industria de la carne (productores ganaderos, personal rural, personal de frigoríficos, transportistas y consumidores), argentinos que generan miles de puestos de trabajos genuinos, movilizan la actividad de pueblos y ciudades, y generan divisas que son tan importantes para el país”.

Una medida de esta magnitud destruye la confianza y genera desaliento. Por eso: “Le pedimos al Presidente (Alberto Fernández) que derogue urgentemente la medida y convoque a un diálogo constructivo. Queremos ser parte de la solución”, añade el Documento de la Fundación.

“El campo y su agroindustria siempre formaron parte de la locomotora, que hizo avanzar a la Argentina en los mercados del mundo, contribuyendo a un mejor bienestar para todos los argentinos” (Noticias AgroPecuarias).

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