De Raíz: Los consejos de dos especialistas para poder tener gallinas en el jardín sin fracasar en el intento
¿Cuáles son los detalles que se debe tener en cuenta a la hora de armar un gallinero? ¿Se necesita un espacio muy grande? ¿Cuánto cuesta? ¿Es poco higiénico? ¿Cuántos huevos da cada gallina? Estas son sólo algunas de las preguntas que algunos expertos respondieron consultados por De Raíz. Tener gallinas en el jardín puede sonar
¿Cuáles son los detalles que se debe tener en cuenta a la hora de armar un gallinero? ¿Se necesita un espacio muy grande? ¿Cuánto cuesta? ¿Es poco higiénico? ¿Cuántos huevos da cada gallina? Estas son sólo algunas de las preguntas que algunos expertos respondieron consultados por De Raíz.
Tener gallinas en el jardín puede sonar algo lejano, se puede presuponer que para tener gallinas en el jardín es necesario tener kilómetros de patio, pero parece que no es tan así.
Dos expertos: Dalila, más conocida en redes como ‘Jardinera Científica’ y Mauricio Méndez de Gallina de Raza fueron consultados por este tema. Dalila despeja todas las dudas desde la experiencia como usuaria y Mauricio da su visto desde el profesionalismo, ya que se dedica a criar y a educar a quienes quieran tener gallineros en casa.
Mauricio Méndez, empieza la charla detallando los beneficios de tener gallinero. Tener huevos disponibles, que es una de las proteínas mas buscadas y económicas. Se puede utilizar heces de animales para compostaje y huerta. Puede tratarse como una mascota y todo los beneficios que eso trae aparejado, además compostan el suelo y comen los bichitos de la huerta, siendo parte del control biológico.
Mauricio dice que tener gallinas es como tener mascotas, implica que hay que desparasitarlas y darles vitaminas como a los animales. Además de estos beneficios él habla de la parte estética, ya que antes se veían los gallineros hechos con dos chapas al fondo de la casa. Ahora además de funcionales los gallineros son estéticos, y vienen gallineros desarmables y móviles.
“No hace falta tener grandes extensiones, el espacio del gallineros es chico, si las vas a tener en un lugar cerrado lo ideal es tres metros cuadrados por gallina y en un lugar abiertos se calculan dos gallinas por metro cuadrado. Se busca que la gallina viva de la forma más natural posible, es por eso que las perchas se hacen de forma redondeada, para imitar rama de arboles.” relata Mauricio.
Para poner huevo las gallinas necesitas luz. La hormona que desencadena el proceso de producción de huevo está en las glándulas pituitarias en sus ojos, y son las que le dan señales al cerebro para empezar a producir, necesitan entre 12 a 16 horas diarias. Es por eso que muchas veces se les brinda luz artificial.
Mauricio también explica que el el gallinero el gallo es necesario para fecundar los huevos y tener pollitos, pero además pone orden y emite un sonido particular cuando hay una situación de peligro, como un por ejemplo algún depredador.
Los gallineros constan de dos áreas, una dónde descansan, allí están las perchas dónde suben, duermen, ponen huevos y están protegidos, tanto de predadores cómo del clima. En la segunda área andan, se esparcen y juegan. En caso de querer dejarlas libres por el jardín, Mauricio recomienda: “Lo ideal es abrirles la puerta a las 5 o 6 de la tarde, cuando cae el solo vuelven solas al gallinero”.
En la charla con Dalila, desde su experiencia explica que “es fácil tener un gallinero. El criterio principal es tenerlas seguras y bien encerradas. Hay que desparasitarlas, mantener el gallinero limpio, alimentarlas bien. Todo se aprende pero es súper fácil”, cuenta Dalila.
Mirá esa entrevista:
Si es una zona donde hay comadrejas, zorros o incluso los propios perros, es clave tener las gallinas seguras. Por ejemplo, el gallinero de Dalila tiene un techo con tejido que da toda la vuelta con un encadenado y está bien enterrado. Esta opción es para evitar que un predador pueda escarbar y entrar por abajo.
Con respecto a la cantidad de huevos, cuenta que en primavera y en verano se llega a tener un huevo por gallina (por día). “En invierno baja bastante la cantidad y depende de la raza; algunas ponen más, otras menos”, agrega.
Si no hay depredadores cerca, también se puede tener las gallinas sueltas en el jardín o soltarlas un ratito. y ella cuenta que existen también unos gallineros móviles con ruedas para “sacarlas a pasear” y que ayuden a trabajar el suelo con las patitas.
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