Alambrados eléctricos para un mejor aprovechamiento forrajero
Desde el INTA Anguil, en La Pampa, el médico veterinario Luis Rhades destaca la importancia del pastoreo planificado y resume las principales claves a considerar al momento de avanzar con el planteo. La entrada Alambrados eléctricos para un mejor aprovechamiento forrajero se publicó primero en Periódico MOTIVAR - Industria Veterinaria - Sanidad Animal.
Desde el INTA Anguil, en La Pampa, el médico veterinario Luis Rhades destaca la importancia del pastoreo planificado y resume las principales claves a considerar al momento de avanzar con el planteo.
Solana Sommantico
solana@motivar.com.ar
Es sabido que el proceso de agriculturización compite con la ganadería bovina, desplazándola hacia zonas de menor aptitud productiva. Esto hace imprescindible que la producción de carne por unidad de superficie, tanto en esos ambientes, como en planteos intensivos, se base en el aprovechamiento eficiente de los recursos forrajeros naturales e implantados. En este sentido, la tecnología de los alambrados eléctricos adquiere un renovado rol, representando una herramienta valiosa para el desarrollo de los sistemas ganaderos.
Una de sus ventajas es que permite generar subdivisiones permanentes o temporales de forma rápida y económica para un mejor uso del pasto. Se mejora el manejo de la carga animal, intensificando el pastoreo rotativo en forma planificada y controlada.
Para conocer más sobre el tema y repasar los últimos avances en Argentina, MOTIVAR tomó contacto con el MV Luis Carlos Rhades, uno de los responsables de la guía de Pautas Técnicas para la correcta instalación y uso de los alambrados eléctricos, publicada desde el INTA Anguil, en la provincia de La Pampa (Ver recuadro).
Manejo del campo natural
“Para evitar los procesos de deterioro del recurso forrajero, se puede recurrir a la implementación de un pastoreo alternativo planificado y ordenado, acorde a las condiciones agroclimáticas, para favorecer la recuperación del pastizal. Para lo cual, hay que pensar en dividir los potreros utilizando el alambrado eléctrico, por su menor costo”, aseguró Rhades.
Y agregó: “Con la implementación de un pastoreo alternativo flexible y la subdivisión del campo en áreas homogéneas de vegetación, se restituirá la calidad de los pastos y la optimización de la eficiencia de producción; pudiendo implementar altas cargas instantáneas, seguidos por el descanso de los potreros”.
MOTIVAR: ¿A qué nos referimos al hablar de alambrados eléctricos?
Luis Rhades: Las cercas eléctricas conforman un circuito cerrado, que consta de un electrificador “boyero” conectado a una fuente externa de alimentación energética, la cual puede ser de 12 o 220 V o dual, de 12/220 V en forma combinada; a una conexión de salida hacia el alambrado a electrificar, “vivo” y una conexión de entrada de tierra, usando como mínimo 3 caños galvanizados de 1/2 pulgada y 2 metros de largo, unidos entre sí y al electrificador.
¿Cuáles son las claves a considerar?
Es importante tener en claro qué es lo que se pretende hacer, con el fin de no incurrir en equivocaciones. Para ello, se debe planificar, teniendo en cuenta la superficie, las subdivisiones a electrificar, los tipos y duración de los alambrados –permanentes, semipermanentes, transitorios-, el tipo de animales –edad, raza y sistema productivo-, y el tipo de suelo de la zona.
¿Cuál es la inversión a realizar?
Para dar una precisión sobre el costo de instalación de un alambrado eléctrico, debemos compararlo con la construcción de un alambrado convencional de 7 hilos. Por lo tanto, hay que tener en cuenta el ahorro de tiempo, la simplicidad, la posibilidad de armar y desarmar el sistema instalado fácilmente.
En definitiva y a modo de graficar la situación, podemos decir que el alambrado convencional tiene un costo (con materiales y mano de obra) de entre US$ 5 a 8, dependiendo la zona; mientras que el alambrado eléctrico, entre US$ 2 y 3.
¿Cuál es el impacto de cometer errores en este tipo de inversiones?
A la hora de construir un alambrado eléctrico se debe presupuestar los insumos necesarios, pudiendo recurrir a aquellos elementos que se disponen en el establecimiento, pero no se debe exagerar en el ahorro. Los elementos caseros pueden ser muy baratos, pero traen problemas y llevan irremediablemente a tener un sistema de electrificación ineficiente y caro.
¿Es trabajo veterinarios y/o agrónomos capacitar en los riesgos de la instalación?
La instalación del alambrado eléctrico agrega una tarea con una cierta complejidad al trabajo rural y como tal, requiere que se adopten las instancias de planificación y diagramación de las parcelas a electrificar. Para ello, antes de iniciar la instalación de un sistema, lo primordial es conocer y entender conceptualmente el fundamento de su funcionamiento.
Por lo es indispensable capacitar a los operarios rurales, para abordar aquellos temas que hagan a la correcta instalación de los alambrados y el uso de los electrificadores, especialmente en regiones semiáridas y áridas; donde la poca o nula humedad del suelo dificultan su correcto funcionamiento.
Un punto a considerar en la implementación de las medidas de seguridad es la correcta elección del electrificador. Cuando sea necesario comprar un boyero, hay que asegurarse que los mismo cuenten con las respectivas certificaciones de seguridad, homologadas por normativas de la República Argentina. (Normas de Seguridad IEC60335-2-76 y IEC 479-2).
Se garantiza que el producto reúne las condiciones de seguridad para las personas y los animales que entran en contacto con el cerco eléctrico; advirtiendo que el uso de electrificadores que no cumplan con normativas de seguridad eléctrica, podrían provocar accidentes fatales.
Para poder asegurar la sustentabilidad y la biodiversidad de los sistemas y lograr mayores índices productivos por unidad de superficie, se requiere generar espacios de capacitación de los RRHH. Muchas veces, por no entender conceptualmente el fundamento de su funcionamiento, no se logra maximizar las posibilidades que ofrece el alambrado eléctrico.
En tal sentido, los ingenieros agrónomos y veterinarios son los indicados para aportar sus conocimientos, para ayudar a instalar el sistema y solucionar los errores que puedan afectar su correcto funcionamiento.
Hacia un manejo más eficiente de la carga animal
Con el objetivo de contribuir al mejor manejo de la carga animal, intensificando el pastoreo, especialmente en regiones áridas y semi áridas, donde la poca o nula humedad del suelo disminuye su correcto funcionamiento, desde el INTA Anguil se avanzó en la publicación de un manual con Pautas técnicas para la correcta instalación y uso de los alambrados eléctricos, abordando conceptos que permiten evitar errores que reduzcan su funcionalidad.
El trabajo realizado por Luis Rhades, Daniel Mandrile, Néstor García, Guillermo Felice y Carlos Magallanes, postula que la cría bovina seguirá concentrándose en aquellas zonas del país con baja aptitud agrícola y asegura que el aumento de la sustentabilidad y producción de carne en esos ambientes dependerá del aprovechamiento eficiente de los recursos forrajeros naturales e implantados. ¿El objetivo? Estabilizar la carga animal y maximizar la rentabilidad de las empresas agropecuarias.
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“Las cercas eléctricas se convierten en una excelente herramienta de manejo, indispensable para la construcción de subdivisiones permanentes o temporarias, en forma rápida y económica, permitiendo un mejor aprovechamiento del pasto, en forma planificada y controlada”, destacaron los autores de la publicación.
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