Cambio climático: la ONU destacó a una empresa argentina por una cosecha orgánica de duraznos
El programa Wipo Green realizó un seguimiento a la producción y finalización de la campaña de una finca ubicada en Tunuyán, en pleno corazón frutihortícola de Mendoza.
El próximo 10 de diciembre no será un día más para la compañía Agrosustentable. Su presidente, Joaquín Basanta, relatará delante de una selecta audiencia en Ginebra, Suiza, de qué se trata el camino de la producción de insumos biológicos.
Viajará hacia allí por un motivo más que especial: como representante de la empresa fue convocado por la Organización de las Naciones Unidas a través del programa Wipo Green, una plataforma global que conecta organizaciones y empresas que buscan soluciones para el cambio climático.
“Tenemos la base la planta de producción en Misiones, y desde ahí trabajamos mucho con pequeños productores. Misiones es una provincia que pone mucho foco en la sustentabilidad y allí nuestros productos funcionan muy bien. Pero también estamos trabajando muy bien en la zona de Cuyo”, reveló en una charla con Infocampo Matías Imperiale, cofundador de la empresa.
En Mendoza, justamente, la empresa acompañó el desarrollo de una producción de duraznos bajo la certificación de Wipo Green que capturó la atención de quienes llevan adelante el programa.
En Tunuyán, cerca de la ruta 40, la cosecha contó con el aporte de fertilizantes e insecticidas suministrados por Agrosustentable que, localmente, distribuyó la firma Astié Diésel.
“Somos la primera firma argentina del sector agropecuario en integrar un proyecto sustentable de la ONU”, destacaron desde Agrosustentable.
PROYECTOS “VERDES” PARA MITIGAR EL CAMBIO CLIMÁTICO
Wipo Green busca acelerar y trabajar con los denominados “proyectos verdes” en toda Latinoamérica. En ese camino, desde la empresa argentina inscribieron su plataforma y lograron el seguimiento del programa.
En ese camino lograron también afianzar el vínculo con Astié Diésel, una de las distribuidoras de YPF Agro que ramifica los servicios en Mendoza y zonas aledañas. Una de las razones es que los productores locales buscaban desarrollar productos cuya sustentabilidad en la producción fuera rápidamente demostrable.
“Entonces, en esa conexión, tuvimos una charla inicial en la que les interesó mucho lo que hacíamos. En la zona trabajamos con un insecticida y un fertilizante orgánicos que dieron pie a una serie de ensayos seguidos por Wipo Green y mucho interés de parte de los productores”, apuntó.
EL DESARROLLO EN CUYO
Entre los principales cultivos que trabajan en la compañía se encuentran la vid, plantaciones de olivos, nogales y producciones hortícolas. El Noroeste argentino es también una de las zonas de fuerte presencia.
“Allí tenemos un equipo comercial que trabaja con grandes cuentas: es común que sean las empresas más grandes las que están a la vanguardia de todo este tipo de cultivos o certificaciones orgánicas”, planteó Imperiale.
Además mantienen la presencia en la Zona Núcleo con ramificaciones en Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires, donde la premisa es estar cerca de los cultivos intensivos.
Pero fundamentalmente la presencia en Cuyo fue lo que hizo que la empresa ganara eco entre los patrocinadores de Wipo Green.
“Nos tomaron como un caso de éxito”, destacó Imperiale.
A raíz de este hecho, fue por eso que el presidente de la empresa fue convocado para diciembre a Ginebra, donde Imperiale aseguró que planteará un concepto claro: “Se puede producir de una manera rentable y sustentable a la vez. El mundo de los bioinsumos cada vez está ganando mayor terreno porque obviamente los resultados agronómicos y en el campo acompañan”.
“Pero también porque hay una demanda global y social de que se puede producir de una manera diferente y porque veníamos con una matriz productiva donde esto no se estaba teniendo en cuenta”, sostuvo Imperiale.
Y sumó: “Tenemos los productos certificados como orgánicos y eso lo que hace es abrir mercados a los productores para para poder llegar con su producción. Estamos viendo que obviamente para poder certificar cómo exportar un productor orgánico se requiere una trazabilidad. Y esa trazabilidad hace que los productores cada vez sean más responsables y profesionales”.
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DRONES PARA LA AGRICULTURA
Hoy una de las grandes apuestas de la firma pasa por la implementación de drones en las tareas agrícolas. Se trata de una nueva unidad de negocio vinculada al mundo tech que busca aportar un servicio integral para todos los productores.
“Ya lo estamos probando en Misiones, pero también hay operaciones para esto en Mendoza y San Juan”, apuntó.
Sobre este punto y el panorama en general, y como antesala a la disertación de Basanta en Ginebra para diciembre, el propio Imperiale participará a fines de este mes en un espacio ante otras empresas, en Rio de Janeiro, Brasil.
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